Hoy os vamos a hablar de una ruta en coche por la Península de O Barbanza, en la provincia de A Coruña. Se trata de una zona situada al norte de las Rías Baixas, en la que se mezclan un paisaje natural increíble, tanto de costa como de montaña, con algunos de los castros y yacimientos prehistóricos más importantes de Galicia. Sin duda, un territorio espectacular para hacer turismo, en el que encontraremos atractivos para todos los gustos.
1.- El río Pedras
Una buena parte de la península se encuentra ocupada por la Sierra de O Barbanza, un cordón montañoso muy cercano al mar, pero que roza en algunos de sus picos los 700 metros de altitud. Desde estas cumbres desciende, vertiginoso y encajado entre rocas, el río Pedras, que en su camino va formando numerosas cascadas y pozas, que podremos visitar a lo largo de un agradable paseo. En verano, se trata de una zona muy frecuentada por bañistas, que acuden a darse un chapuzón en sus piscinas naturales. Así que ya sabéis, mejor llevar el bañador por si acaso.
Allí podremos conocer también el viejo puente de A Miserela, del que se dice que formaba parte ya de una antigua calzada romana (parece que lo cierto es que el paso actual procede de época medieval, pero es posible que hubiese otro más antiguo en el mismo lugar). Además, en los alrededores se encontraba el Monasterio de San Xoan de Lesón (año 1392), del que todavía se conservan algunos restos.
2.- Miradores de Valle-Inclán y A Curota
Ascendemos por una estrecha carretera (en buen estado) que nos conduce hacia lo alto de la Sierra de O Barbanza. Como decíamos, estas montañas se encuentran muy cerca del mar, por lo que nos podemos hacer una idea de las vistas espectaculares que nos ofrecen, sobre todo de la parte de la Ría de Arousa; primero llegaremos al Mirador de Valle-Inclán (A Curotiña) y un poco más arriba al Mirador de A Curota (510 metros sobre el nivel del mar). Ambos lugares se encuentran dentro de un espacio declarado como Sitio de Interés Natural, sobre todo por sus extraordinarias panorámicas y por el valor ecológico de su entorno.
3.- Dolmen de Axeitos
Nos encontramos ante uno de los dólmenes más antiguos, más grandes y mejor conservados de toda Galicia. Este hecho, junto con la gran importancia que tiene para los investigadores, ha provocado que sea conocido por muchos como el «Partenón Gallego». Se trata de una curiosa estructura funeraria construida, con grandes losas de piedra, hace casi 6.000 años, en la que podemos encontrar además varios grabados prehistóricos.
4.- Mirador Pedra da Ra
Otro de los miradores espectaculares que podemos encontrar en esta zona es el de Pedra da Ra, que recibe el nombre de la roca sobre la que se asienta ya que, con un poco de imaginación, veremos que tiene la forma de este animal (rana). Desde allí tendremos unas vistas estupendas de la zona de Aguiño, de la Isla de Sálvora y del Parque Natural de Corrubedo. Además, en las proximidades se encuentra el Castro da Cidá, un enorme poblamiento de la Edad de Hierro, que en la actualidad se encuentra en proceso de excavación.
5.- Pedregal de Couso
En la zona conocida como Punta Falcoeiro, muy derca de Aguiño, encontramos un paisaje muy curioso formado por grandes rocas moldeadas por la erosión. Allí, además de dar un paseo por los alrededores y disfrutar con las vistas del mar de Sálvora, podremos conocer la leyenda del «Hombre de Sagres», una historia milenaria de la que proceden muchos de los nombres de los islotes de esta costa.
6.- Parque Natural de Corrubedo
Se trata de uno de los espacios naturales más importantes de Galicia, en el que destacan sus zonas húmedas de importancia internacional y, sobre todo, su gran duna móvil, uno de los símbolos de la comarca. Aquí podremos realizar varios recorridos y rutas de senderismo que nos adentrarán en el corazón del espacio protegido, conociendo algunos de sus ecosistemas de mayor importancia.
Corrubedo cuenta con 1.000 ha. de superficie y, según las estadísticas oficiales, es el parque natural más visitado de toda Galicia y uno de los mayores atractivos para el turismo en toda la comunidad (unas 300.000 personas al año). Declarado Parque Natural en 1992 aquí se encuentran, además de la célebre duna, las lagunas de Vixán y de Carregal, auténticos paraísos para los amantes de la naturaleza en general y de la ornitología en particular (otras figuras de protección: LIC, Sitio RAMSAR, ZEPA, ZEPVN…).
Si seguimos el recorrido en Rutea App: Turismo y Rutas de Senderismo, nos llevará primero hasta el Centro de Recepción de Visitantes y después hasta la zona de la duna.
7.- Las Dunas de Corrubedo
Como decíamos, el principal atractivo del Parque Natural de Corrubedo es su espectacular duna móvil, única en Galicia y la más grande del norte peninsular. Tiene una extensión de más de 1 km de longitud, 250 metros de ancho y una altura que llega a superar incluso los 20 metros en su zona más elevada (se dice que antiguamente podría superar los 60 metros, pero que la acción del hombre la fue deteriorando). Además, como no podría ser de otra forma, el lugar se encuentra rodeado de leyendas que nos aseguran, por ejemplo, que debajo se encuentra una ciudad perdida o que algunas noches se escuchan los lamentos de una princesa.
8.- Faro de Corrubedo
La zona de Corrubedo, repleta de acantilados y de rocas traicioneras, tiene una extensa historia de naufragios. Para evitarlos, en 1852 se decidió construir el faro, que desde entonces se mantiene vigilante como guardián incansable de los marineros. Se trata posiblemente, junto con Fisterra y Cabo Vilán, del faro más importante para la navegación en Galicia, localizado además en un rincón espectacular.
Muy cerca del faro podemos conocer además la pequeña localidad de Corrubedo (concello de Ribeira), una de las poblaciones tradicionales de la costa gallega que mejor conserva su esencia. Así, a pesar de la llegada del turismo y del crecimiento urbano, todavía nos podemos encontrar una localidad tranquila, que nos invita a pasear por su muelle y dar una vuelta por alguno de sus barrios marineros entre las ruinas de las fábricas de salazón.
9.- As Furnas
Preciosa playa situada en el concello de Porto do Son (A Coruña), conocida principalmente por dos razones. En primer lugar, por la existencia de unas bonitas formaciones rocosas y piscinas naturales, conformadas por la acción erosiva del mar (son las «furnas» que dan el nombre al arenal). La otra, por ser el lugar en el que se produjo el trágico accidente que dejó a Ramón Sampedro postrado en una cama hasta el día de su fallecimiento (en el lugar hay una estatua en su honor).
10.- Puente de Xuño
Antiguo puente medieval sobre el río Sieira, por el que cruzaba un antiguo Camino Real (se dice que también pasaba por allí una vieja calzada romana, posiblemente sobre un paso todavía más antiguo). El río, el puente y el frondoso bosque de ribera en el que se encuentran, conforman un bonito rincón por el que merece la pena pasear.
11.- Castro de Baroña
Baroña es uno de los castros más bellos y singulares de toda la comunidad, antiguo poblamiento habitado por tribus prehistóricas desde la Edad de Hierro. Allí podremos visitar las ruinas de unos 30 edificios, además de los restos de las torres y de las murallas defensivas. Por si todo esto fuera poco, el yacimiento se encuentra localizado en un entorno espectacular, sobre una pequeña y escarpada península que se adentra en el mar. Sin duda, uno de los puntos imprescindibles para hacer turismo en Galicia.
12.- Fervenza de Ribasieira
El río Sieira, el mismo que discurre tranquilo por debajo del Puente de Xuño, desciende aquí, en lo alto de la Sierra de O Barbanza, vertiginoso y encajado entre rocas. Así, en este tramo se forman varios saltos de agua, entre los que destaca el de Ribasieira, con unos 15 metros de altura.
13.- Monte Enxa
Seguimos en la zona alta de la Sierra de O Barbanza, más concretamente en el pico conocido como Monte Enxa (539 metros de altitud). Se trata de un mirador excepcional sobre la Ría de Muros e Noia, que nos ofrece una espectacular panorámica que incluye el Parque Natural de Corrubedo y el Monte Louro. En su cima se encuentra además el Centro de Control Marítimo, una instalación que controla el paso de los más de 40.000 barcos que navegan cada año por esta costa.
14.- Porto do Son
El lugar elegido para terminar (o comenzar) nuestro recorrido es la localidad de Porto do Son (A Coruña). Allí podremos pasear tranquilamente por su puerto, en donde trabajan todavía unas 20 embarcaciones, dedicadas en su mayoría a la pesca del pulpo. También podremos recorrer el pequeño paseo que nos lleva hasta la Capilla de la Atalaia, con unas vistas preciosas de la ría, o conocer el Centro de Interpretación del Castro de Baroña.